Luego de diagnosticar el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, el siguiente paso es determinar qué tratamiento y en qué cantidad, funciona mejor para tu hijo. Para ello, se debe considerar que cada caso presenta grados de incidencia distintos y algunos síntomas pueden ser más predominantes que otros.
Los diferentes tratamientos para el TDAH pueden incluir medicamentos, terapia conductual, asesoramiento y servicios educativos. Aunque estos se van ajustando conforme a la reacción que se observe en el niño.
Hay que tomar en cuenta que ningún tratamiento cura el TDAH, lo que sí puede es aliviar muchos de sus síntomas y ayudar a llevar una vida más plena. Es por ello que se trata de un proceso continuo que puede demorar en arrojar resultados satisfactorios.
¿Cómo se trata el TDAH en niños?
Los psicoestimulantes son actualmente el fármaco más recetado para tratar el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad.
Los estimulantes tienen la tarea de equilibrar los niveles de neurotransmisores en el cerebro. Algunos de estos estimulantes son:
Anfetaminas: dextroanfetamina, dextroanfetamina-anfetamina y lisdexanfetamina.
Metilfenidatos: metilfenidato y el dexmetilfenidato.
Los medicamentos psicoestimulantes que se pueden recetar pueden ser de acción corta o prolongada. Lo importante es que cualquiera de estos principios activos sean administrados en dosis pediátricas revisadas por profesionales.
Las dosis de medicamentos varían según el organismo de cada niño, por lo que puede llevar algún tiempo encontrar la cantidad de miligramos correcta.
Hay que tomar en cuenta que muchas veces el tratamiento debe ajustarse para evitar efectos secundarios, y aumentar la dosis con los años.
¿Los medicamentos estimulantes traen consecuencias a la salud?
Algunos médicos sostienen que los medicamentos estimulantes llevan a una serie de consecuencias, tales como:
Problemas cardiológicos: estos medicamentos pueden llegar a causar un aumento de la presión arterial o de la frecuencia cardíaca. Por ende, el Psiquiatra debe evaluar cualquier enfermedad o indicio de problema cardíaco antes de recetar un medicamento estimulante.
Problemas psiquiátricos: se cree que los estimulantes pueden aumentar el riesgo de agitación o psicosis, aunque estos no están comprobados y son muy poco frecuentes.
Otros medicamentos para el TDAH
Otros medicamentos que pueden ser recetados para el tratamiento del TDAH, son:
Atomoxetina.
Guanfacina.
Clonidina.
Atomoxetina.
Antidepresivos.
¿Cómo brindar medicamentos de manera segura?
Para brindar medicación con seguridad, es importante cerciorarse de brindar la cantidad correcta del medicamento recetado. Verifica los miligramos antes de cada dosis y lleva un orden especial para esos detalles.
Es importante tener en cuenta que tu hijo debe ver al médico regularmente, ya que por tratarse de medicación continua debe ajustarse la dosis periódicamente.
Además, recuerda mantener seguros los medicamentos de tu hijo, algunas recomendaciones para ello, son:
- Los medicamentos deben ser administrados por ADULTOS RESPONSABLES.
- Mantén los medicamentos en un recipiente cerrado, en un lugar de difícil acceso acceso para los niños.
- No dejes en manos de tu hijo los suministros de medicamentos. Llévalos directamente al personal de enfermería de la escuela.
¿Existe terapia del comportamiento para el TDAH?
La psicoterapia conductista puede llegar a brindar muchos beneficios a los niños con TDAH. Esto comprende formación y guía en habilidades sociales, capacitación en habilidades parentales y asesoramiento continuo, que pueden ser proporcionadas por un psiquiatra, psicólogo u otro profesional especializado en la salud mental.
Algunos tipos de terapias recomendadas para el TDAH, son:
Terapia conductista: se centra en estrategias que buscan un cambio de conducta (recompensas y los tiempos de reflexión) para lidiar con berrinches y comportamientos impulsivos.
Capacitación social: ayudan al niño a conocer y aprender comportamientos apropiados.
Capacitación parental: los padres pueden aprender a desarrollar mecanismos de entendimiento y de guía para la conducta de sus hijos.
Psicoterapia: esta terapia es de gran ayuda para los niños mayores, ya que les permiten hablar sobre sus problemas y adquirir maneras de lidiar con sus síntomas.
Terapia familiar: esta puede ayudar a la familia completa a enfrentar los problemas de convivencia de los niños con TDAH.
Los mejores resultados se alcanzan con trabajo en equipo entre los maestros, padres, cuidadores, terapeutas y médicos.
Si tu hijo está recibiendo tratamiento para el TDAH o ya fue diagnosticado, asegúrate de poner su salud mental en manos de los mejores profesionales. ¡Consigue tu cita y recibe la ayuda psicológica que necesita!
