En este artículo hablaremos sobre el Ghosting; la práctica virtual que, cada día, se utiliza más en el ámbito online. Primero definiremos en qué consiste el ghosting, para luego explicar cómo se vive desde el lugar de quien lo sufre. También, daremos algunas herramientas emocionales para aprender a lidiar con el ghosting.
¿Qué es el ghosting?
El ghosting es una práctica que, hoy en día, se está haciendo tendencia en el mundo de las redes sociales. Consiste en cortar una relación sin dar ningún aviso ni explicación previa, dejando de responder los mensajes o cualquier tipo de interacción con la otra persona. Ghosting viene de la palabra del inglés Ghost, que significa “fantasma”, por lo que sería una forma de desaparecer completamente ante la otra persona.
Es claro, que el mundo de la virtualidad habilita a que esta práctica se realice con más asiduidad, pero también podríamos encontrar su símil en las relaciones presenciales, cuando una persona deja totalmente de lado a la otra. Por ejemplo, el no contestar una llamada, o no atender el llamado a tu puerta.
El ghosting es, sin duda, una práctica que lamentablemente se está haciendo cada vez más frecuente. Es una forma muy cruel de terminar una relación, porque deja a la parte afectada en un estado de confusión. Podríamos decir, que el ghosting responde a una realidad que se puede ver cada vez más en el mundo de las relaciones afectivas actuales: la superficialidad y la falta de compromiso.
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Consecuencias del ghosting
Si te hicieron ghosting, esto puede desencadenar una serie de problemas emocionales y psicológicos, ya que es una situación desagradable para vivir.
El principal sentimiento que esta situación despierta es el abandono. Haber estrechado un vínculo con una persona genera satisfacción, ilusiones y sentimientos de placer. Cuando todo esto es retirado, sin explicación, se dispara nuestro profundo complejo de ser abandonados. Esto desencadena una serie de consecuencias que mencionamos a continuación.
- Baja nuestro autoestima
Que una persona a la cual apreciamos nos deje de hablar o siquiera responder, afecta nuestra autoestima. Podemos pasar tiempo sintiendo que no fuimos suficientes o que “hay algo mal con nosotros” y por eso la persona nos dejó de hablar. A fin de cuentas el abandono genera un profundo sentimiento de rechazo.
- Nos sentimos culpables
Pensamos que podemos haber hecho algo que estuvo fuera de lugar y por eso nos hicieron ghosting. Podemos pasar tiempo rememorizando una conversación y arrepintiendonos de lo que dijimos o cómo lo expresamos algo que a la otra persona no le puede haber gustado.
- Tristeza
La tristeza y la angustia es normal que aparezca frente a esta situación. El problema será si se prolonga mucho en el tiempo y no nos permite continuar con nuestra vida diaria.
- Obsesión
Podemos obsesionarnos con las razones por las cuales la otra persona desapareció y estar pendientes de esto gran parte del día.
¿Por qué me hicieron ghosting?
Las razones por la que una persona puede hacer ghosting son diversas. Hay que tener en cuenta que muchas de estas razones ni siquiera son conscientes para la otra persona. Les comentamos algunas de las razones más comunes en estos tiempos para hacer ghosting:
Depresión
Hoy en día las personas sufren mucho de esta enfermedad que inhabilita el contacto social y emocional con las personas. Por falta de ánimo, la persona puede cortar de a uno, sus vínculos afectivos.
Miedo
Muchos pueden ser los miedos que surgen a la hora de vincularse con los otros. Desde llegar a comprometerse y sentirse responsables de la otra persona hasta tener miedo de ver a una persona a la cara y pasar del chat al encuentro presencial. El miedo siempre va a impedir que las relaciones se tornen más profundas y podrá ayudar a que suceda mucho el fenómeno del ghosting.
Narcisismo
Una persona narcisista suele buscar solo la atención de otras y nada más. Este tipo de personas tienen muchas dificultades para vincularse ya que solo lo pueden hacer desde un lugar superficial. Un narcisista puede manipular y hacernos sentir culpables de sus propias acciones. Es importante entender que el narcisismo es un trastorno de personalidad, y que relacionarnos con alguien que lo padece probablemente nos lleve a consecuencias afectivas.
Cómo lidiar con el ghosting
Aunque ya repasamos las consecuencias afectivas y los motivos por los que la otra persona nos hizo ghosting, ahora comentamos los puntos a tener en cuenta para llevar adelante esta desagradable situación.
Dejarse Sentir
Poder sentir el dolor y la tristeza de haber perdido contacto con esa persona es el punto más importante. Esto es algo muy natural en los seres humanos frente a un duelo o pérdida. Poder sentir nos permitirá no querer controlar la situación y simplemente dejarla ir. Aceptar ese sentimiento de rechazo permitirá un gran crecimiento interno.
Cuidarnos
Obsesionarnos en las razones del ghosting o qué estará haciendo la otra persona solo nos generará ansiedad y estrés. Poder empezar a valorar lo que nos hace bien en la vida será parte del proceso de sanación. Retomar actividades, vínculos, hábitos será lo que nos devuelva a nuestra vida normal de nuevo con el paso del tiempo.
Volver a vincularnos
Seguir adelante será enfrentar los miedos. Muchas veces tenemos miedo a volver a repetir la misma situación y por eso evitamos involucrarnos afectivamente con alguien más. Es importante tener en cuenta que no hay dos humanos iguales en este mundo y extrapolar una situación a otra será contraproducente para nuestra vida social.
Contactar un profesional
Poder recurrir a un psicólogo profesional, si la situación es demasiado dolorosa, puede ser una buena opción. Pedir ayuda, al revés de lo que comunmente se cree, es un acto de valentía, no de debilidad.
Ghosting vs Poner Límites
Sin lugar a dudas, el ghosting es una práctica que denota la imposibilidad de poner límites en quien lo lleva a cabo. En su incapacidad de expresar sus sentimientos para terminar con una relación, opta por la forma más cómoda y que menos emociones involucra. Lo que esta parte no sabe es que, esas emociones quedan dentro sin ser tomadas en cuenta, y eso puede tener consecuencias bastante negativas.
Por otro lado, el poder decirse a uno mismo y al otro; “no quiero más esto” o “quiero terminar con esta relación porque no me hace sentir bien”, denota una consciencia propia más desarrollada, y una capacidad para contemplar los sentimientos del otro de una forma más empática. Saber poner límites es, también, una forma de relacionarse amorosamente.
Por qué no hacer ghosting
Lastimamos al otro: esta es la principal razón para que entendamos que el ghosting es una práctica dañina y que no deberíamos realizarla. Si queremos terminar una relación siempre es importante hacerlo desde una comunicación sana.
No se cierra el ciclo: el ghosting deja siempre algo sin cerrar y eso puede generar heridas tanto en quien lo sufre, así como en quien lo realiza. Los ciclos que no cierran no dejan en un lugar inconcluso, y eso puede generar estados de ansiedad y depresión.
Nos estancamos: cuando una de las partes de una relación afectiva, ya sea amorosa o de amistad, realiza el ghosting para cortar con ese lazo, sucede que no está pudiendo dar cuenta, realmente, de lo que le pasa. De esta manera, actúa impulsivamente y sin generar consciencia sobre porque quiere terminar con esa relación. Se actúa desde un lugar oscuro, sin consciencia.
Conclusión
Si sufrimos una situación de ghosting, debemos entender que es normal sentirnos afectados emocionalmente. Poder seguir adelante con nuestra vida no será de un momento para el otro, ya que los sentimientos y afectos llevan tiempo en desarrollarse. Permitirse sentir, cuidarnos a nosotros mismos, permitirá volver a tener nuevos vínculos e incluso fortalecerlos con el tiempo gracias a nuestras experiencias desagradables.
Si por el otro lado hemos hecho ghosting, quizás nos estamos perdiendo de una oportunidad de reflexión y autoconocimiento, ya que llevar a la acción el acto sin consciencia no permite la transformación. Entender por qué queremos alejarnos de esa persona y hacerlo de una forma más humana, generará crecimiento personal y crecimiento emocional.
