Las relaciones amorosas traen mucha felicidad y satisfacción, pero pueden llegar a ser peligrosas si los involucrados expresan sus emociones de manera violenta. Algunas veces la violencia se puede manifestar de manera física, psicológica, sexual o hasta económica.
Pero, en cualquier caso, siempre se tratará de conductas abusivas y controladoras, que pueden tener consecuencias devastadoras para las víctimas. No solo pueden sufrir de violencias visibles como empujones, pellizcos, golpes o mordiscos, también pueden presenciar actos más sutiles como los insultos, amenazas y humillaciones.
Otra forma en la que se manifiesta la violencia en el noviazgo se refiere a los chantajes emocionales, y al promover sentimientos como el miedo, ansiedad y depresión. También se suele mostrar al limitar la libertad y autonomía, cuando una de las partes controla los recursos económicos de la otra.
En realidad, la violencia en el noviazgo afecta a millones de personas alrededor de todo el mundo, y se puede producir a partir de acciones muy simples. Sin embargo, el mayor problema se encuentra al confundir estas situaciones negativas con amor. Y es ahí cuando se permiten los malos tratos hasta el punto de convertir la relación en una fuerza verdaderamente destructiva.
No todas las relaciones son perfectas, pero eso no significa que se deban aceptar malos tratos en nombre del amor. La violencia en el noviazgo se puede presentar por diferentes factores, como:
Violencia en la familia de origen
Generalmente, las personas que han sido víctimas de violencia en su familia de origen, tienen un mayor riesgo de ser agresores. Sin embargo, también existen los casos en que ellos mismos se pueden convertir en las víctimas de violencia en sus propias relaciones de pareja.
No obstante, es importante resaltar que haber sido víctimas de relaciones abusivas al crecer no justifica hacer daño a los demás, y mucho menos continuar en relaciones violentas. Lo más recomendable es sanar patrones de abuso con profesionales de la salud mental.
Baja autoestima
Otra de las razones por las que puede ocurrir violencia en el noviazgo tiene que ver con la baja autoestima. Lo cierto es que las personas con baja autoestima pueden ser más propensas a tolerar el maltrato y a creer que no merecen algo mejor.
Esto se debe a que las personas con baja autoestima tienen una imagen negativa de sí mismas. Pueden creer que no son valiosas o que no merecen ser tratadas con respeto. Por lo tanto, son mucho más propensas a aceptar el maltrato de su pareja. Además, las personas con baja autoestima son más vulnerables a la manipulación y al control, mientras los agresores se aprovechan.
Falta de comunicación
Cuando las parejas no pueden comunicarse de manera efectiva, pueden surgir malentendidos y conflictos que derivarán en abuso. De esta forma, la falta de comunicación puede ser un factor que contribuya a la violencia en el noviazgo.
La razón principal radica en que la comunicación es la base de cualquier relación sana. Solamente con la comunicación se puede expresar los sentimientos, necesidades y deseos, así como escuchar a la pareja. Si esta es inexistente o frágil, es muy posible que comiencen los abusos psicológicos, emocionales y hasta físicos.
Consumo de alcohol y otras sustancias
Lo cierto es que el consumo de alcohol y otras sustancias pueden aumentar las probabilidades de la violencia en el noviazgo. Las personas que se encuentran intoxicadas suelen perder con mayor facilidad el control de sus emociones y de esta forma, cometen actos violentos.
Esto se debe a que el alcohol y otras sustancias inhiben el funcionamiento del cerebro, lo que significa que pueden hacer que las personas sean más impulsivas. Y quienes son impulsivos actúan sin pensar en las consecuencias de sus acciones y que pueden lastimar a las personas que más quieren.
Actualmente, resulta indispensable tener la capacidad de identificar los factores que contribuyen a la violencia en el noviazgo para poder prevenirla. Cualquier persona puede ser propensa a sufrir de maltratos, sobre todo de aquellos que son más cercanos, como sucede en las relaciones de pareja.
Si estás sufriendo de violencia en el noviazgo, no te quedes callado y busca ayuda. Comienza pidiendo una cita con un psicólogo para afrontar las consecuencias de estas situaciones tan desagradables. No permitas que el trauma te dificulte relacionarte con otras personas y confiar en sus buenas intenciones. No todos saben expresarse a través de la violencia.